Descripción
Descripción
Eran las 11.15 de la mañana del 19 de julio de 1989 y el coronel José María Martín-Posadillo Múñiz viajaba en un coche oficial junto al comandante Ignacio Julio Barangua Arbués y el soldado conductor Fernando Vilches Herranz. Acababan de salir del Cuartel General del Ejército de Tierra y, al detenerse frente a una oficina de Renfe a hacer unas gestiones, dos miembros de ETA ametrallaron desde un coche el vehículo de los militares. Tanto José María Martín-Posadillo Múñiz como Ignacio Julio Barangua Arbués murieron en el acto al alcanzarles varios disparos en la cabeza. El soldado Fernando Vilches, de 18 años y que realizaba su primer día de servicio como chófer, resultó herido de extrema gravedad.
José María Martín-Posadillo Múñiz había nacido en Toledo fue enterrado en el cementerio de Zaragoza. En 2005 recibió el ascenso honorífico a general en el acuartelamiento Capitán Mayoral de Zaragoza. “Me ha costado tragarme las lágrimas, aunque este reconocimiento ayuda un poco a superar la pena —señaló su viuda María Isabel Franco, con motivo de este homenaje—. Pero hay cosas que no se olvidan nunca porque el trauma es tremendo”.
#TalDiaComoHoy de 1989 #ETA asesinó en #Madrid al comandante Ignacio Barangua de 37 años y al coronel José María Martín-Posadillo de 56. Cuatro niños quedaron huérfanos de padre. El soldado conductor quedó gravemente herido. Los ametrallaron.
¡Esto era ETA viva! 🧵 pic.twitter.com/rXkQFeWDvT
— Consuelo Ordóñez (@ConsuorF) July 19, 2024