Descripción
Descripción
Vicente Soria Blanco trabajaba en la fábrica de tornillos Ormaechea de Placencia de las Armas. La mañana del 30 de marzo de 1976 iba camino del negocio cuando dos etarras le dispararon a muy corta distancia ocho tiros y huyeron en un coche. Un compañero, Aurelio Torres, presenció el atentado y se acercó a auxiliar a Vicente, que solo articuló a decir “me han matado, me han matado”. Mientras se alejaban del lugar, los terroristas lanzaron una granada de fabricación alemana que no llegó a explotar porque tenía puesto el seguro y que la Guardia Civil retiró dos horas después.
Vicente Soria llevaba veinte años viviendo en el País Vasco, donde se había casado y había tenido cuatro hijos. Su familia especuló con que el crimen se debió a que Vicente tenía amigos guardias civiles.
#TalDiaComoHoy de 1976 cuando Vicente Soria, conocido por Julián, se dirigía a la fábrica en #Arrasate, dos #etarras le descerrajaron 8 tiros. Un compañero suyo que iba por detrás todavía le escuchó decir "me han matado, me han matado"
¡ETA y su lucha trabajadora!#impune 🧵 pic.twitter.com/92YaNVxqp7
— Consuelo Ordóñez (@ConsuorF) March 30, 2024