Gallery

Descripción

Nacido en: Pamplona
Edad: 22
Hijos: 0
Estado civil: Soltero
Ocupación: Dirigente de los CAA
Fecha del atentado: 11/06/1980
Lugar del atentado: Saint-Jean-de-Luz
Arma: Desconocida
Asesinado por: Otros

Descripción

El 11 de junio de 1980, José Miguel Etxeberria Álvarez, de 22 años, acudió a una cita con algunos miembros de la organización de ETA militar en la localidad francesa de San Juan de Luz para hablar sobre sus contactos con un traficante de armas. El joven no regresó del encuentro y su cadáver nunca fue encontrado.

José Miguel Etxeberria, alias Naparra o Bakunin, había formado parte de los comandos especiales de ETA político-militar, y después se integró en ETA militar, banda terrorista que finalmente abandonó para integrarse en los Comandos Autónomos Anticapitalistas (CAA). En 1978 había huido a Francia. En el momento en que desapareció, era un destacado líder de los Comandos Autónomos Anticapitalistas.

Este es un caso más de desaparición y de autoría confusa. El 24 de junio de 1980, un comunicante anónimo llamó al diario Deia en nombre del Batallón Vasco Español y reivindicó su secuestro, asegurando que estaba en España y que correría la misma suerte que los asesinados por ETA en los últimos tiempos. La familia hizo público un comunicado suplicando que no fuese asesinado. Unos días más tarde la agencia EFE se hizo eco de una información facilitada por fuentes de toda solvencia en el País Vasco francés donde se afirmaba que Naparra habría sido asesinado por sus propios compañeros de los Comandos Autónomos Anticapitalistas, tras apuntarse que había viajado el día de su desaparición a Bruselas en compañía de José Luis Arsuaga Amundaráin, con el encargo de comprar armas en la capital belga.

El 4 de julio un comunicante anónimo volvió a llamar al diario Deia y anunció que Naparra había sido asesinado el 30 de junio, y amenazó con proseguir las acciones “contra los terroristas marxistas de ETA”. Para añadir más confusión al caso, sus propios compañeros de organización, los de los Comandos Autónomos Anticapitalistas, difundieron un comunicado donde dudaban sobre la autoría del BVE respecto al secuestro y asesinato.

En este caso, a diferencia de otros miembros de ETA u organizaciones afines asesinados por grupos ultraderechistas o parapoliciales, no tuvo tanta respuesta en la calle o en los plenos municipales; esto es debido a que, al contrario que ETA, los CAA carecían de un brazo político. En este caso también influyó en la falta de respuesta las sospechas que apuntaban a que no había sido la extrema derecha quien había asesinado a Naparra.