Descripción
Descripción
La mañana del 20 de agosto de 2000, los agentes de la Guardia Civil José Ángel de Jesús Encinas e Irene Fernández Perera recibieron una llamada en el cuartel de Sallent de Gállego (Huesca) para acudir a un servicio en las fiestas de una localidad vecina. Eran pasadas las 6.00 horas y los policías se apresuraron a coger el coche.
Cuando Irene Fernández se montó en el vehículo y arrancó el motor, se activó el dispositivo detonador de una carga explosiva de 10 kilogramos adosada a los bajos del Nissan Patrol. La onda expansiva la alcanzó de lleno y la mató en el acto, e hirió mortalmente al agente De Jesús, que estaba rodeando el automóvil para sentarse en el asiento del copiloto. ETA reivindicó el atentado. Los terroristas José Ignacio Guridi Lasa, Aitor Aguirrebarrena Beldarrain y Asier Arzalluz Goñi fueron condenados como autores materiales del crimen y Javier García Gaztelu, alias Txapote, como inductor.
José Ángel de Jesús Encinas, de 22 años, era hijo de un agente de la Guardia Civil y muy aficionado a practicar deporte. La localidad de Sallent de Gállego era su segundo destino, en el que llevaba tres meses. El día en que lo mataron, acababa de reincorporarse a su trabajo después de sus vacaciones de verano.
Eran las 6 de la mañana del año 2000 en #SallentdeGállego los @guardiacivil Irene Fernández y José Ángel de Jesús se montaron en el coche oficial para hacer su ronda, cuando arrancaron el vehículo una potente bomba lapa estalló matándolos. #TalDiaComoHoy#MemoriaReciente ⤵️ pic.twitter.com/Jl9nQgUPjN
— Consuelo Ordóñez (@ConsuorF) August 20, 2024
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