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Descripción
Descripción
Un comando de ETA colocó una bomba lapa en los bajos del vehículo del vendedor ambulante Ignacio Bañuelos Lasso, una vieja camioneta que utilizaba para comerciar con chatarra. El estallido alcanzó de lleno a Ignacio, que perdió el control de la camioneta y fue a estrellarse contra la fachada de una antigua discoteca. El cadáver quedó atrapado en la cabina, con la pierna izquierda casi seccionada del tronco.
No era la primera vez que ETA atacaba a la familia Bañuelos. Un año antes,el 7 de octubre de 1988 un primo de Ignacio, Ramon Bañuelos, había sido asesinado por el mismo método. En enero de 1991, dos mujeres de la misma familia, María García Bañuelos y su hija, Laura Manzanares García, de once años, fueron heridas de gravedad mediante una bomba adosada a los bajos de la furgoneta que ocupaban.
Algunos vecinos del fallecido aseguraron a la Policía que la víctima estaba involucrada en el tráfico de drogas, algo que fue desmentido por su familia.
#TalDiaComoHoy de 1989 #ETA asesinó a Ignacio Bañuelos en #Bilbao con una bomba lapa. Era vendedor ambulante. Su primo Ramón fue asesinado por el mismo método el año anterior.
ETA se cebó con esta familia.
También #Impune
HILO ⤵️
— Consuelo Ordóñez (@ConsuorF) November 15, 2023
Prensa
