Descripción
Descripción
Tras haber terminado su jornada laboral en el Servicio de Vigilancia Fiscal de la Guardia Civil en el Puerto de Bilbao, el agente Francisco Álvarez Gómez se dirigió a su domicilio para coger el coche y acudió a tomar una consumición a un bar que frecuentaba cerca de la estación de ferrocarril, a poca distancia de donde vivía. Cuando maniobraba para aparcar su coche frente al bar, estalló una bomba adherida a los bajos de su vehículo. No falleció en el acto sino cuando era conducido al hospital de Cruces.
#TalDiaComoHoy de 1991 unas horas antes del comienzo de la campaña electoral, #ETA asesinó en #Ortuella al @guardiacivil Fco. Álvarez con una potente bomba lapa en los bajos de su vehículo.
¿Os imagináis morir así?
¡Esto era ETA y así hacían política!
HILO ⤵️ pic.twitter.com/aj5t6HMOcT
— Consuelo Ordóñez (@ConsuorF) May 9, 2024