Descripción
Descripción
Ángel Pascual Múgica salió conduciendo su propio vehículo para dirigirse a las oficinas centrales de Iberduero. En el asiento del copiloto iba su hijo Íñigo, de 19 años, al que llevaba a la parada del autobús escolar. Al llegar a la altura del número 5 de la calle Médico Pedro Cortés, dos terroristas se situaron en el lateral del coche, por el lado del conductor, y abrieron fuego contra él y contra su hijo. Ángel Pascual Múgica falleció en el acto y, aparentemente, su cuerpo protegió la vid de su hijo frente a los disparos de los etarras. Aunque detrás del coche de Múgica circulaban otros dos vehículos con dos escoltas cada uno, eso no impidió el atentado.
El asesinato de Pascual Múgica se produjo el día en el que se formó la Sociedad de Gestión de la Central Nuclear de Lemóniz y el lehendakari Garaikoetxea aseguró que seguirían llevando a cabo los proyectos energéticos previstos. En cambio, los trabajadores de Lemóniz se negaron a volver a su trabajo mientras continuase el acoso por parte de ETA.
#TalDiaComoHoy de 1982 #ETA asesinó a Ángel Pascual en #Bilbao delante de su hijo Iñigo que iba con él en el coche, dos etarras se situaron en el lateral del coche y abrieron fuego contra ellos, fue un milagro que resultara herido solo en una mano.
También #impune
HILO ⤵️ pic.twitter.com/kdxWokZ3JO
— Consuelo Ordóñez (@ConsuorF) May 5, 2024